miércoles, 20 de enero de 2016

El Perdón es para mi, no puede ser de otra manera.



Cada noche antes de acostarme, leo una frase que tengo al lado de mi cama: "Almu hoy las 24 horas del día, has hecho lo que querías?… si no es así, me pido perdón"

He leído esa frase tantas veces, que creo que la debo de tener más que archivada en mi consciente e inconsciente, sin embargo, me doy cuenta de como al amanecer vuelvo a establecer una cadena de pequeños juicios, culpas, responsabilidades, cargos de conciencia que son solo míos.

Soy una máquina de hacer juicios!!!!! Os pasa?? Intuyo que si, pues si todos somos UNO, sería difícil que no estuviéramos experimentando lo mismo. Siento que precisamente para eso es la atención de la que tanto hablamos. Atención para observar las críticas que aparentemente de forma inocente me voy cargando y arrastro como un carro a mi espalda, hasta ese momento de la noche en el que me pido perdón.

El perdón lo es todo. TODO. El perdón hacia uno mismo… a veces eso me cuesta entenderlo y explicarlo. Para comprender el perdón tan liberador hay que tener un poquito de base jajajaja, al menos así lo siento yo. Si no hay base, es complicado. Es como si quiero encontrar un tesoro sin cavar, sin profundizar, como si en la playa intento ver una sencilla "coquina" en la superficie… no es fácil, pero tampoco difícil, he de meter la mano entre la arena y palpar, con calma, sin prisa… y soltar las expectativas, el intento de control.

Me pido perdón por mis críticas diarias.
Me pido perdón por generarme miedo.
Me pido perdón por no cuidarme.
Me pido perdón por no reírme más.
Me pido perdón cuando me tomo las cosas demasiado en serio.

Y vuelve el JUEGO…

Yo no pido perdón cuando juego!! El perdón es parte del juego… ¡¡no podía ser de otra manera!! El UNO no lo permitiría.



Almu Fuentes